El gobernador Alfredo Cornejo encabezó en la Ciudad de Buenos Aires el cierre de la sexta edición del programa federal “Gestión para el Desarrollo”, una iniciativa del Consejo Federal de Inversiones (CFI) destinada a capacitar a jóvenes de todo el país. El encuentro, realizado en Goldcenter Eventos, reunió a gobernadores, referentes académicos y más de un centenar de becarios de entre 21 y 35 años.
Cornejo compartió el panel con Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Carlos Sadir (Jujuy), Claudio Poggi (San Luis) y Axel Kicillof (Buenos Aires). Durante la actividad, los mandatarios abordaron los desafíos del desarrollo argentino, la necesidad de profesionalizar la gestión pública y el rol de las nuevas generaciones en un contexto global en constante transformación.
El mensaje de Kicillof y la sorpresa del auditorio
La participación del gobernador bonaerense generó un momento especial. Kicillof llegó retrasado por “algunos incidentes” y fue recibido con una ovación que llamó la atención de los presentes. Frente a más de 400 jóvenes, afirmó:
“Hay que defender la Universidad Pública y no dejar que privatistas y miserables dejen afuera a miles de pibes de la educación”.
Sus declaraciones —centradas en criticar políticas de los años 90 y modelos neoliberales de desregulación— sorprendieron al resto de los gobernadores, que venían desarrollando una conversación enfocada en producción y desarrollo.
El mandatario bonaerense advirtió que las medidas de apertura indiscriminada “ya se probaron en Argentina” y que su resultado fue “más pobreza y desigualdad”. Además, remarcó que Buenos Aires es una provincia productiva que necesita industrializar su riqueza natural con trabajo argentino y no para intereses externos.
La frase de Cornejo y su crítica al diagnóstico del kirchnerismo
Consultado por la prensa tras el panel, Cornejo respondió directamente a los dichos de Kicillof:
“Su respuesta fue típica del kirchnerismo. Creo que hay un balance negativo de los 40 años de democracia, y esa responsabilidad la tienen las malas administraciones”, sostuvo.
El mandatario mendocino repasó los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner y de Alberto Fernández, y remarcó que esa lógica de interpretación de la realidad “genera alternancias que terminan siendo retrocesos para el país”.
En ese marco, subrayó que Argentina debe superar la idea de que el desarrollo depende de “más Estado y menos sector privado”. Para Cornejo, el camino es un Estado inteligente que acompañe a un sector privado más amplio y dinámico, recordando que Argentina es uno de los países con menos empresas por cada mil habitantes.
El mensaje de Cornejo ante los jóvenes: profesionalizar la política y construir consensos
Durante su intervención en el cierre del programa, Cornejo destacó públicamente la labor del CFI y el valor del programa para formar a futuras generaciones de dirigentes. Sostuvo que Argentina atraviesa más de cuatro décadas de democracia sin lograr un desarrollo sostenido, pero aclaró que el problema “no es la democracia, sino administrar mal lo público y la falta de consensos de largo plazo”.
Señaló como ejemplo los modelos de Chile y Uruguay, que lograron desarrollarse a partir de políticas estables más allá de los cambios de gobierno. Y aseguró que Argentina puede generar beneficios para las mayorías populares dentro de las reglas republicanas y la competencia de ideas.
El Gobernador llamó a profesionalizar la política, entendida como servicio público riguroso y no como voluntarismo, y afirmó que “no hacen falta chambones que buscan poder sin propuestas”.
También alentó especialmente a los jóvenes:
“Aquí hay futuros gobernadores y, por qué no, futuros presidentes”, aseguró, despertando aplausos.
Para el mandatario, el país necesita superar ciclos de frustración y construir políticas de Estado duraderas que permitan un crecimiento inclusivo y sostenido.
Los aportes de los otros gobernadores
Rogelio Frigerio destacó el sentido federal del programa y la importancia de construir un consenso sobre el rumbo del país, basado en trabajo, esfuerzo y oportunidades productivas. Llamó además a integrar a los jóvenes a las decisiones públicas.
Carlos Sadir valoró la experiencia de los becarios y remarcó el nuevo perfil productivo de Jujuy, basado en minería y energías renovables, que exige nuevas capacidades y formación técnica.
Claudio Poggi, visiblemente emocionado por la primera participación de jóvenes puntanos tras el regreso de San Luis al CFI, afirmó que la riqueza de un país está en la formación de sus recursos humanos. Promovió el liderazgo positivo, la perseverancia y la educación.
Finalmente, Axel Kicillof profundizó en un análisis histórico de los modelos de desarrollo aplicados en Argentina, insistió en la necesidad de agregar valor local y sostuvo que la formación será clave para que los jóvenes puedan conducir los procesos productivos del futuro.
